La MLB se encuentra en un dilema y básicamente todo se reduce a dinero. La liga de beisbol no ha logrado llegar a un acuerdo. Por un lado está la crisis de salud por la pandemia de coronavirus y, aunque Estados Unidos se está reabriendo después de dos meses de encierro, la situación para los deportes se mantiene incierta.
Además de los problemas a nivel Estado, la MLB como institución deportiva simplemente no logra llegar a un acuerdo entre jugadores y el staff directivo. Como lo mencioné en un inicio, el problema es el dinero.
Los dueños se reusan a pagar sueldos completos por una temporada más corta y sin audiencia. Y los jugadores tampoco quieren ceder sus ganancias solamente porque los grandes deals del negocio se han visto afectados.
Y los entiendo a los dos. Por un lado los dueños no pueden pagar los mismos sueldos si sus ingresos se ven radicalmente reducidos al no tener los ingresos por la venta de boletos y consumo en los estadios. ¿De dónde van a sacar los billetes?
Pero, también los jugadores están en su derecho. Después de todo, de regresar al diamante, ellos estarían cumpliendo con su parte del contrato. Aunque si la temporada se reduce, ahí sí que no jugarían todo lo que su sueldo incluye.
Ese es el mayor dilema, que todos sufren y todos tienen la razón también. Sin embargo, si no logran llegar a un acuerdo entre estas dos partes, lo que va a suceder es que no habrá temporada este año, y ahí sí, todos perdemos. Especialmente nostros los fans, quienes nos mantenemos ilusionados sobre el regreso del beisbol.
Una de las posiciones de la liga es que no se juegue hasta que las audiencias puedan regresar a los estadios. El problema es que no tenemos idea de cuándo sucedaerá eso, y todo pinta a que no será durante 2020.
En conclusión, si jugadores y dueños no llegan finalmente a un acuerdo, podría ser que no haya beisbol hasta el próximo año. Nadie quiere eso.
[lawrence-auto-related count=3]