Las quinielas no fallaron esta vez y el favorito Inglaterra avanzó sobre Dinamarca en las semifinales de la Eurocopa.
Italia e Inglaterra protagonizarán una gran final en la cancha de Wembley el próximo domingo en la primera de dos finales soñadas pues más tarde, en el Maracaná, Brasil y Argentina harán lo propio.
Pero no fue nada sencillo para Inglaterra conseguir el 2-1 con el que ganaron, pues tuvieron que irse hasta la instancia de los tiempos extras para definir la serie cuando el portero Schmeichel ya era el héroe de Dinamarca.
Los daneses se fueron al frente en el marcador con uno de los mejores goles del torneo cortesía del fabuloso Damsgaard que cobró un tiro libre de manera perfecta.
Pero Inglaterra logró irse al descanso con el empate en el marcador gracias a un autogol provocado por una genialidad de Harry Kane. El delantero filtró una pelota extraordinaria que en la diagonal retrasada un defensor danés empujó en contra.
Así concluyeron los 90 y ya en tiempos extras vino una jugada con mucha polémica que el árbitro sancionó como penal en favor de Inglaterra y el VAR confirmó. Kane cobró pero Schmeichel detuvo, sin embargo en su intento de quedarse con la pelota dejó rebote y Harry empujó en una segunda instancia para poner a Inglaterra en una final de un torneo oficial desde que ganaron el Mundial en casa en el lejano 1966.
Foto portada ESPECIAL
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