Los San Francisco 49ers dejaron ir una ventaja de 10-0 a le semana pasada para terminar con una derrota 19-10 ante los Chicago Bears gracias a las condiciones de lluvia en el Soldier Fields y una relativa inexperiencia del quarterback Trey Lance. No tuvieron que lidiar con ninguna de estas dos cosas en la segunda semana de la NFL y mejoraron su resultado con un 1-1.
Un clima rasonable y una lesión en el primer cuarto que terminó por dejar fuera a Lance llevó a que Jimmy Garoppolo regresara triunfante a la alineación. Garoppolo no tuvo que hacer mucho , solo lanzó 21 pases después de que los Niners controlaran el juego desde el inicio, él solo protegió su ventaja a través de 45 jugadas más.
Lo que vimos del jugador de primer equipo que se volvió la banca para volversxe en el QB de primer equipo otra vez fue positivo. Completó 62% de sus pases, perdió cero yardas a través de sack y evitó malas jugadas y completó dos tuchdowns, uno por tierra y otro por el aire.
No se le pidió mucho. Definitivamente no mostró esa explosión que Kyle Shanahan busca tan desesperadamente que incluso estuvo dispuesto a intercambiar sus tres primeras selecciones de draft tan solo para elegir a Lance en 2021:
Solo tres de los pases de Garoppolo cubrieron más de 15 yardas. Esto no fue un problema porque los Seahawks son malos, pero seguramente significará que Shanahan tenga que arrancar varias páginas de su libreta de jugadas.
Nada de esto esto es nuevo. En 2021, el QB de los Niners estaba en la posición 22 del ranking con un promedio de profundidad de lanzamiento de 7.5 yardas. A pesar de una constante de pases más cortos y fáciles, Jimmy G tuvo un promedio de intercepciones que lo ubica en una buena posición.
En 2019 estaba en la posición 31 del ranking de quarterbacks según distancia de lanzamientos. Con su porcentaje de 2.7 en intercepciones estaba rankeado en el 26. Aunque Garoppolo gana juegos (32-14 ahora como el quarterback principal de San Francisco) intenta demasiados pases cortos y demasiadas veces los lanza mal.
Los 49ers están listos para esto porque han lidiado con ello cada una de las últimas 5 temporadas. Es por eso que han cultivado un cuerpo de receptores que han ganado yardas para el equipo después de la atrapada desde 2018. Deebo Samuel, Brandon Aiyuk y George Kittle (cuando se recupere) se llevarán el balón seis yardas abajo y después serán tacleados ocho yardas después. San Francisco usará eso y un ejército de running backs.
Con eso están bien. O al menos con eso estuvieron bien el domingo.
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